Mes de julio (sí, sí, el mes del César). Atípico, alocado, CALUROSO y, pese a todo a resultado prolífico. Una grata sorpresa haber recibido tantos testimonios de lecturas y visionados.
Uno diría que el calor nos iba a aplatanar, que la presencia del festival CELSIUS 232, hoy por hoy el mejor festival de género de España, nos iba a dispersar, que las idas y venidas a Avilés y alrededores consumirían nuestros días de asueto…¡Pues no! Al parecer ha sido todo lo contrario. Nuestra tropa Cylconita (los socios de la ACLFCFT o CYLCON) ha estado inquieta, nerviosa y trabajadora. Estoy seguro que se debe a nuestra asistencia masiva (casi treinta socias y socios, mayoría de mujeres, creativas, intensas, arrolladoras) al festival. Nuestra presencia y continuos contactos con toda la gente del Celsius, nuestro crecimiento en socios, una especie de sobreexcitación que nos hemos debido de quitar leyendo mucho y bien después del evento.
Había que bajar el mono de un acto tan intenso. Y aquí estamos. Veamos lo que hemos leído.
Kate Lynnon: «Me temo que este apartado va a ser breve, pues además de algunas aventuras más de Kirinyaga, de Mike Resnik, lo único que he empezado y terminado en este mes ha sido una de mis múltiples adquisiciones de este último Celsius 232: Batalla por el Olimpo, de nuestro querido Escuadrón 42. Ha habido muertes que no me esperaba, mientras que otras las veía venir desde el principio. Unas me han dado pena; otras, no demasiada. En todo caso, hacía tiempo que no me enganchaba ni me divertía tanto leyendo.»
Bueno, diréis, no es para tanto, que Kate apenas haya leído nada… ¡Pero es que se agotó toda mirando a los ojos a todos los compradores de Revelaciones, antología de Con pluma y píxel en la que participa junto a Madame Eloise y Edith del Campo y adivinándoles su futuro! A mí me puso los pelos de punta, ya os digo. Y al que pregunte “¿qué pelos?” tiene todo mi odio enardecido. Y el esfuerzo sentimental de leer Batalla por el Olimpo (¡tantas muertes, tantas!).
Peña Cid: «Una gran lectura ha poseído mi mes de julio. Y diréis que solo es una novelette ligera pero Nia, de una tal Patricia Reimóndez, ha sido una magnífica lectura para unos días en los que el calor me derretía hasta la voluntad. Una historia mágica donde una luchadora aldeana elige tomar el camino prohibido para salvar a su gente y termina transformando una vieja leyenda en el poder que su pueblo necesitaba para salir adelante. Una historia fantástica, de fantasía mágica en la que el corazón femenino brilla con todo su poder.»
Peña no estuvo en el CELSIUS, ¡ooohhhh!. Pero allí nos acordamos de ella. Y nos encanta la novela que ha leído. Queremos más el mes que viene, ¿eh?.
Raquel Linares: «He leído Nia, una novelette muy tierna de Patricia Reimóndez en la que una campesina quiere que su familia no pase hambre y para ello se aventura en el bosque que, según la leyenda, estaba custodiado por un ser terrible llamado la dríada. Parece ser que la leyenda no es muy cierta y la protagonista lo irá descubriendo.
Me ha gustado mucho porque es muy fácil de leer, tanto que me lo leí en una noche. También me gusta mucho como poco a poco te deja ir descubriendo al ser del bosque y como poco a poco va evolucionando su relación con la protagonista. Muy recomendable.
También he leído Batalla por el Olimpo: El torneo: Un libro del Escuadrón 42 en el que, en un futuro distópico, jóvenes de las clases sociales más bajas se tienen que enfrentar entre ellos para conseguir ser los siguientes dioses. Dependiendo del dios que se les hubiera asignado tenían que hacer diferentes pruebas hasta que sólo quedase uno de cada Dios.
Me gustó mucho porque siempre te deja con un nudo en la garganta por las pruebas y la gente que dejan atrás. Recomiendo no encariñarse con ningún personaje y no empatizar mucho con ellos porque se pasa realmente mal. Me lo leí en un día porque siempre te deja con la intriga y las ganas de saber quién gana finalmente. Lo recomiendo mucho también.»
(Sí, sí, repetir las portadas, que creamos hipe, ¿no?)
¿Veis? Esa juventud, que sabe bien a lo que agarrarse para una buena lectura. Ni que decir tiene que SHAME para los papás por no haber leído nada este viaje, que lo sepan. Esperamos mas lecturas y comentarios de nuestros socios mas jóvenes. ¡Ilusionados estamos!
Alex González: «En julio me dije: “Si sólo tienes tiempo de leer un libro, va a tener que ser este”. El hombre hembra (Joanna Russ, 1975) es uno de esos que dicen que son indispensables, pero que no puedes encontrar en ninguna lista convencional de la mejor ciencia ficción de todos los tiempos. Y es una lástima, porque sí, es un libro indispensable.
Cuarenta y siete años han pasado de esta maravilla, casi medio siglo, y me he encontrado entre sus páginas más innovación, más coraje y más pasión por romper las convenciones que en casi nada de lo que haya leído en la última década.
Las cuatro mujeres que conforman el relato son totalmente actuales, es como si en este tiempo nada se hubiera avanzado, o se estuviera retrocediendo. Pero más allá de su visión feminista (y sólo por eso, ya sería una obra magnífica) la estructura narrativa es un desafío intelectual y una fiesta.
Mi pasión al recomendarlo no hace justicia a la abrasadora tormenta de fuego de sus páginas: ira, angustia, frustración, también comprensión, amor y racionalidad. Si sólo tienes tiempo de leer un libro este verano, que sea este.
P.S.: Bueno, al final me dio tiempo a leer más cosas, como la muy notable y recomendable La anomalía (Hervé Le Tellier, 2020), una novela coral que evidencia la maestría de su autor al trazar personajes y caracterizar géneros literarios. Una obra pesimista desde su primera frase o, tal vez, simplemente realista respecto a la incapacidad humana para regir su propio destino.
P.S.S.: Por supuesto, podéis encontrar la reseña ampliada de ambas obras en alt64.org»
Magnifica (y olvidada) novela la que nos recomienda hoy Alex. Lo que de El Hombre Hembra cuenta se queda pobre, por lo que recomiendo encarecidamente que os leáis su reseña en Alt64 sin falta. Esa y cualquier otra que encontréis, con tal que os lleve a buscar y leer la novela.
Carmen Sánchez: «Este mes de julio he aprovechado las vacaciones al máximo y no he parado de leer. Empiezo con el formato audiolibro, con el que me estoy ventilando el Mundodisco. Uno de mis propósitos lectores de este año era darle una segunda oportunidad a Pratchett, porque lo tenía encasillado desde que leí El color de la magia (sí, ya te estoy diciendo que le estoy dando otra oportunidad). El caso es que me está encantando y este mes he escuchado Mort y Rechicero. Los dos me han gustado un montón y he disfrutado muchísimo. Me los pongo para hacer ejercicio, así que la gente a mi alrededor se debe de pensar que estoy loca por reírme tanto.
Y ahora paso a los libros leídos. Empecé el mes con Una rosa para decirte te quiero, de Yaiza Sevillano. Es un retelling de La bella y la bestia con hombres lobo y seres feéricos, así que estaba dentrísimo desde el principio. Siguiendo con los hombres lobo —¿problema? ¿Quién? ¿Yo?— leí Cómo salir con un hombre lobo y no morir en el intento de María R. G. Ya había leído a la autora en fantasía pura y dura, pero aquí (fantasía urbana) me ha sorprendido para bien. Es un librito ligero, ideal para el verano, que disfruté un montón.
Cambiando de tercio y adentrándonos en la España profunda, leí Donde callan las piedras, de Ángela Vicario. La verdad es que la premisa me encantaba: fantasía en la España más castiza, con una historia de hace mil años que se entrelazaba. No obstante, el libro no ha sido lo que me esperaba, aunque no sabría decir exactamente por qué.
También de la misma editorial (Dorna), leí Misterios entre las olas. En plena ola de calor, a ver si me refrescaba un poquito. Se trata de una antología de fantasía, ciencia ficción y terror ambientada en ambientes marítimos y que tuvieran una base de algún misterio real. La antología en general me gustó, aunque como suele pasar con las antologías, hay relatos que me encantaron y otros que me dejaron fría. Mis favoritos fueron «Del otro lado del abismo» de Loren Ysella y «La sinfonía del diablo» de Rocío Galeote.
Viene ahora uno de los libros que más he disfrutado en julio: Una visita inesperada de Irene Morales. Todo lo que he leído de la autora me ha fascinado y esta novela no podía ser menos. Al principio te conquista por su prosa y después por la historia. No estoy segura de si ponerle la etiqueta de fantasía o de terror, de terror fantástico, de fantasía terrorífica… En fin, recomendadísimo.
Otro de mis propósitos lectores de este año fue acabar la saga de Las pruebas de Apolo, de Rick Riordan. En general, los libros de Riordan me gustan y me agotan al mismo tiempo. Demasiada emoción seguida, ya soy una persona mayor, la necesito más dosificada. Pero solo me quedaba un libro de la saga y tenía que acabarla sí o sí. La torre de Nerón vuelve a tener un montón de aventuras con seres mitológicos —e históricos—, con los personajes que ya conocíamos de sagas anteriores. Creo que este es el libro que más me ha gustado de toda la saga.
Y ahora me paso a los libros de terror. Empiezo con La ruta del llop, de Gloria Carrasco, aunque no sé si se podría clasificar más como terror que como thriller, a mí me hizo pasarlo mal. Desapariciones en un bosque, amigos que no son tan amigos… Gloria siempre consigue contar y resolver crímenes en unas cuantas pinceladas y es una maravilla.
En el Celsius me hice con un buen pack de novelettes de terror, de las que pude leer unas cuantas. Cartas tras el velo de Leticia S. Murga, en una Vitoria que no se parece en nada a la nuestra, cuenta la historia de un nigromante que tiene que hacerse pasar por detective. Él no tiene ni idea de cómo hacerlo, pero le ayuda su hermano muerto. La caza del último ojáncano de G. G. Lapresa, en la Cantabria del siglo XIX, con toques de fantasía y de mitología de la zona que enganchan desde el principio. Y Los espíritus del humo de M.ª Concepción Regueiro Digón, que me flipó desde la primera línea. La forma de la narración, cómo va desvelando información poco a poco… Recomendadísimos también.
Y por último, pero no por ello menos importante, otra adquisición del Celsius, pero nos alejamos del terror. Se trata de Nía de Patricia Reimóndez. A estas alturas creo que todos los cylconitas sabéis de qué va, así que solo voy a decir que me ha dejado con el corazón calentito, me ha transportado a la más tierna infancia y me ha dado ganas de plantar tomates. ¡Objetivo conseguido, Patricia!»
¿Ahhhssss, aaaahhsss, sin respiración me he quedado!¡Menudo maratón de lecturas interesantes!: Mundodisco, Nía, y todo un elenco de antologías y novelas de fantasía y terror. ¿Tú, este verano, has dormido por las noches o eres una Vampira de esas que toleran la luz del sol un poquito? Al Páter le haces muy feliz con este montón de lecturas, que lo sepas.
Beatriz Sánchez: «Una novela de ciencia ficción del autor cylconita David Nel: Netz. Pensé que no iba a gustarme demasiado porque no es mi estilo de libro, pero lo devoré en tres ratos. Es ciencia ficción, sí, pero una ciencia ficción blanda que tiene mucho de thriller y de reflexión social. Invita a darle vueltas a problemas tan actuales como la adicción a las apuestas y la falta de privacidad. Imposible soltarla una vez que te engancha. La reseñé para el blog Algunos Libros Buenos.»
Primera toma de contacto con la nueva novela de David Nel. Yo la tengo pendiente, así que Beatriz me anima a leerla enseguida. Apuntada queda. La reseña de la novela en el blog es muy buena.
Patricia Reimóndez: «Voy a traer mucha luna por aquí y mucha escritora. De lo último que he leído voy a hablar de lo que más me ha gustado.
La luna para damas de Concepción Regueiro Digón es una novela ambientada en los últimos años de la República española que cuenta el viaje a un balneario situado en la luna de un variopinto número de personas. Está narrada en forma de diario, el diario de Pilar, una mujer con problemas económicos que aceptará trabajar para una periodista que desea cubrir la noticia. Para mí tiene un aire a las novelas de Julio Verne en la parte del viaje a la luna y también cierto toque a El ángel exterminador de Buñuel en su parte de disección social en una época de tensión política como fueron los días previos al golpe de estado y comienzo de la guerra civil. Ciencia ficción con toque de terror, muy, muy disfrutable.
Luna 174 de Clara Duarte. A mí este libro me ha maravillado por la forma de escribir de esta jovencísima autora. Esta es su primera novela y cuenta la historia de Luna, una huérfana con una cualidad muy peculiar: es capaz de ver el color del alma de las personas. La mayoría son grises salvo la de Gaia que es blanca. Luna 174 es principalmente una historia de amor, con dos giros en su historia, el primero puede parecer extraño y hasta forzado, pero cuando llega el segundo y definitivo giro narrativo todo cobra sentido y te deja…
Todas las chicas descalzas de Nieves Mories. Esta antología la leí en el club de lectura Hijas de las sombras. Si bien en general me resultó algo irregular, unos relatos me fascinaron y otros me dejaron fría, no porque me parecieran flojos, sino porque al girar casi todos en torno a la misma temática me provocaron cierto cansancio, pero solo por leer La chica descalza en la colina de arándanos ya merece la pena toda la antología. Qué bestialidad de relato, qué manera de manipularte para dejarte rotísima al final, aún no me he recuperado del impacto que supuso leerlo. A lo mejor me vengo arriba, pero Nieves Mories es una maestra del terror. También recomiendo dentro de esta antología Miss American Pie.
Omega de Isabel Pedrero. Ambientación cyberpunk, teletransportes, robos, un poco de comedia, una cuchipandi adorable y una señora detective cercana a la jubilación que hace ganchillo. Si con estos elementos no te entran ganas de leer Omega yo ya no sé qué más decirte. Tiene un pero, que es solo la primera parte y quedan muchas cosas en el aire. Isabel, ponte las pilas, queremos Omega 2.
Batalla por el Olimpo: El torneo de Escuadrón 42. Pues a ver cómo lo explico. Que una señora como yo esté en plan «fan girl» con este libro, deseando comentar la jugada y muriéndose porque salga la segunda parte, no tiene nombre. Aunque reconozco que me hice lío con algunos personajes, sobre todo si me importaban un comino, esta novela tiene un gran mérito (o varios): es la primera novela de cinco personas con todas las dificultades que ello implica. Batalla por el Olimpo es una gran presentación de un mundo que puede recordarte a otros, pero que tiene su propia personalidad. Un mundo dividido no solo entre los de abajo, la Suburbe, y los de arriba, Olympus, sino entre diferentes niveles de privilegio. Cada veinte años, jóvenes entre 13 y 20 años son elegidos para participar en las pruebas y convertirse en nuevos dioses de Olympus. Los dioses no son inmortales y las pruebas a las que se enfrentaran son brutales y crueles. Cuatro aspirantes por dios y solo sobrevivirá uno. El sufrimiento está garantizado, sobre todo si te pasa como a mí que todas mis favoritas aspiraban a la misma diosa (lágrimas y más lágrimas). Quedan muchas incógnitas por resolver. Qué es Olympus en realidad y el porqué de esas pruebas son un misterio. ¿Qué les pasará ahora a los nuevos dioses? Yo necesito saberlo ya.»
Luna lunera, cascabelera, debajo la cama tengo la… y no me acuerdo de más. A pesar de las muchas lunas, Patricia tiene la cabeza en la tierra, por lo que es muy recomendable echar un vistazo a las obras que ella ha leído y nos recomienda.
Marco Granado: «Me uno al club de fans de Layla Martínez. Carcoma es una absoluta maravilla. Muy bien escrito, una trama sencilla pero perfectamente hilada y (se nota) tan trabajada que consigue que todo fluya de manera natural. A mi mujer también le ha encantado, y no es nada fan del terror.
También, uno de Darrel Gregory: After party. En un futuro cercano y posible, aparece una droga sintética que te hace contactar con dios. ¿Con cuál? Eso va en función de la persona. Gregory, con una estructura de novela negra y un humor muy negro, da sentido a un galimatías de personajes psicóticos, hampa y grandes empresas. La protagonista (una de las creadoras de la droga, acompañada permanentemente por su propio ángel-psiquiatra, efecto de una sobredosis de la droga), es impagable. Muy interesante.
Por último, Dark West, antología de terror escrito aquí hablando del lejano oeste. La premisa de partida es muy original y refrescante. No he conseguido acabarlo aún (tengo demasiados libros de relatos empezados en mi mesilla) pero prometo hacerlo. El nivel medio es más que aceptable, y es de Suseya. Si acaso, he tenido un cierto empacho de autores masculinos (solo dos autoras), con lo que supone de sheriffs investigando asesinatos inexplicables. Con todo, a mí, que me gusta leer a gente nueva de vez en cuando, me ha merecido la pena la compra.»
¡Ay, Carcoma! Esta si que la he leído y… Marco tiene razón. Es una gran novela corta. Algo con lo que esta de acuerdo todo el mundo. Y del Gregory, ya me lo recomendó Alejo, su editor. Me lo recomendó efusivamente y logró vendérmelo. Me congratula saber que la opinión de Marco confirma que Alejo tenía razón. Las cosas de la vida…
Marta Rodríguez: «Las Alas del mal, de Rocío Galeote (Insomnia). Empieza como una investigación policiaca típicamente americana, pero pronto se descubre el componente sobrenatural… Y es cuando empiezas a disfrutar aún más. Muy recomendable, se lee del tirón aunque, como es mi caso tengas que quedarte leyendo hasta la madrugada porque eres incapaz de soltarlo.
Un mundo Vuestro, VVAA (Ediciones Labnar): antología en la que participo y en la que hay historias de todo tipo puesto que no sigue una línea temática única. De las del género, mi favorita es Bakken, de Irene Miguel Bueno, una fantasía urbana con una historia de amor preciosa ambientada en un antiguo parque de atracciones danés.
Batalla por el olimpo, el torneo, del Escuadrón 42 (Insomnia). Una vez cada veinte años, los jóvenes elegidos de la Suburbe deben competir para convertirse en uno de los dioses del Olimpo… No os encariñéis con ningún personaje, no digáis que no os avisamos. Aunque yo he tenido la suerte de que mi favorita llegara a la final.
Plomo al cuadrado, de Stark Holborn (Ed. Transbordador). Weird western ambientado unos Estados Unidos alternativos, donde los matemáticos están perseguidos a muerte. Tenía mucho hype con esta novela pero, aunque me ha gustado, me ha dejado un poco fría, será porque mi relación con las matemáticas es de odio-odio y no le pillo el punto a los párrafos en los que, por ejemplo, calculan la trayectoria perfecta de una bala.
Nía, de Patricia Reimóndez (Les Editorial). Una historia preciosa de amor, no sólo romántico, sino también a la familia, la sociedad y la naturaleza, que te deja el corazón calentito y una sonrisa de felicidad.
Reflejos de Shalott, de Gemma Bonnín (Nocturna ediciones). Mezcla de las narraciones esenciales de la Materia de Bretaña, ideal para empezar a relacionarse con ese mundo. Si ya conoces bastante del mito artúrico, se te quedará escasa. Impecablemente escrita y muy bien hilada con la leyenda de la Dama de Shalott.»
¡Hala!, mas obras que me son desconocidas y con buena pinta. Despiertan mi curiosidad, claro. ¡Hala!, otra vez mas las novelas de las Cylconitas, y van… Cuando el rio suena.
Alfredo Herrero: «Julio ha sido un mes cargado. En lecturas, el destacado fue Hagan sitio, hagan sitio de Harry Harrison. Me dejó el cuerpo descolocado al estilo de La carretera o de La chica mecánica, dibujando un futuro digamos que poco apetecible, de lenta cocción. También entré de lleno en la antología de Cuentos para Algernon IX. Ahí descubrí los retelling, y me recomendaron la antología (Per)Versiones: Cuentos Populares, plagada de ellos. Después de un tercio se han quedado llorando en #LaPila hasta que los recuerde…»
Fruto del CELSIUS, y de haber conocido y desvirtualizado a mucha gente maja, es la incorporación de gente interesante como Alfre al club Cylconita. Aquí nos cuenta lo que ha leído por encima pero si le preguntamos para que profundice sobre las obras os podéis caer de espaldas. Menuda fuente de conocimiento que es el chico. Preguntárselo al club de lectura de Lola Mérida, donde es un colaborador indispensable. No me le atosiguéis ahora ¡eh!.
Y una vez más, me tocaría a mi contaros lo que he leído. No quiero ocupar mas sitio, así que de corrido, y para que no me pongáis falta: Carcoma, claro. Todo Marco Granado (pronto aparecerá su entrevista). Todo Alba, medio Isabel, un poco de David, Jorge… Así que de leer Batalla, Artigue, y toooodo lo que compré en el CELSIUS, ni pum, de momento.
Disfrutar, al menos, de las portadas. Si además leéis los comentarios de todas estas obras nos iríamos entendiendo. Hay mucho y bueno, y entretenido.
El visto de julio, en un par de días.